Resiliencia.

Un faro en la tormenta de la vida;
En aguas agitadas;
Se convierte en fuerza que nos guía;
Como roble ante el viento;
Firme, sin doblegarse;
Con convicción y aguante;
La resiliencia es el motor;
Que nos impulsa a levantarnos.

En los momentos de obscuridad;
De desiertos;
De sequedad;
Cuando parece no haber nada;
La resiliencia nos muestra el camino;
Para seguir la luz; 
Ante las adversidades;
Somos el fénix renaciendo;
Desde las cenizas del dolor;
Una y otra vez emergiendo.

Las heridas del pasado;
Marcas de valentía;
Testigos silenciosos;
De lucha y energía;
La resiliencia es como un fuego;
Arde en nuestro interior;
Una llama que nunca se apaga;
Un eterno resplandor.

A través de lágrimas;
Y las noches más largas;
La resiliencia nos sostiene;
Como faro en bruma;
En cada desafío;
Encontramos fortaleza;
Y a pesar de las caídas;
Emergemos con valentía. 

La vida;
Puede parecer un sendero;
Lleno de espinas;
Pero la resiliencia nos enseña;
Donde brota la flor;
Nos da el regalo de hacernos más fuertes;
Y mejor.

La tenacidad;
La capacidad de sobreponernos;
Sin perder la esencia y la integridad;
Con cada batalla enfrentada;
Con cada cicatriz en el alma;
La resiliencia es el hilo;
Que teje nuestra historia;
Con laureles de victoria.

Isabella Melo.
Comparte tu aprecio

Un comentario

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *